Como diría mi querida tocaya en la grabación de nuestro podcast: ser mamá es vivir entre la culpa de trabajar y la culpa de pasar el tiempo con tus hijos. ¡Que duro es vivir así! Pero te puedo decir querida mom que estas palabras de Diana retumbaron en mis oídos por un largo tiempo, porque es completamente cierto, vivimos culpándonos por todo: lo que sale bien y lo que sale mal porque quisiéramos estar todo el día con nuestros hijos pero también tener la oportunidad de trabajar en nuestro negocio para seguir creciendo.
Quiero decirte que no podemos vivir así y que, si podemos llevar ambos papeles disfrutando sin culpas, aunque sé que todo mundo nos dice “sí se puede” – yo te lo digo ahorita también- y las redes sociales nos muestran que otras mamás son exitosas en ambos papeles, ¿Por qué nosotras no lo vamos a lograr?
Bueno quiero que sepas dos cosas: la primera es que en realidad sí se puede, solo es cuestión de hacer consciencia sobre el lugar que cada uno de estos papeles tiene en nuestra vida, porque la mayoría de las mujeres que decidimos emprender lo hacemos porque nos hemos enamorado de nuestro proyecto, porque disfrutamos realmente lo que hacemos y además por supuesto, se ha vuelto nuestro ingreso y, por otro lado, ser mamá ha sido la decisión más importante de nuestra vida que le da un giro de 180 grados a nuestra vida, nos hace suspirar, reír, llorar y amar incondicionalmente a una persona depende 100% de nosotros, razón por la que queremos que estén lo mejor protegidos posibles a nuestro lado.
Lo segundo que necesito que sepas es que las redes sociales no son reales, lo que vemos perfecto en una foto, un video que ha sido tomado exactamente para eso, por lo que no vemos el caos y la imperfección que hay detrás en la vida de cada mamá que publica, así que no te sientas mal por eso.
Quiero compartirte lo que a mí me ha funcionado para no sentir culpa por ser una mamá que trabaja que seguramente te pueden ayudar a ti querida mom:
- Aprendí a trabajar desde mi casa en un horario de tarde- noche para aprovechar los espacios en los que mis hijos duermen.
- He aprendido a pedirle ayuda a mi esposo para cuidar a nuestros hijos cuando yo necesito el tiempo para grabar, tener reuniones o terminar mis pendientes.
- Trato de darme un tiempo para mí: para tomar un café, salir por el súper, ir con alguna amiga a desayunar o simplemente salir sola y despejarme.
- Trato de estar presente en lo que me corresponde: cuando estoy con mis hijos, los disfruto, les hago caso y me dedico al 100% a lo que estoy haciendo con ellos y cuando estoy trabajando, trato de hacer lo mismo.
- He aceptado que nada será perfecto y que en ocasiones mis hijos lloran, hacen berrinche, quieren estar conmigo, aunque esté en una reunión o trabajando, debo tomar un mini break y atenderlos.
- Tomo por lo menos dos días de descanso de mi trabajo.
- Llevo una agenda flexible que me permite trabajar sobre objetivos y no sobre un horario.
- No saturo mi día de actividades laborales y en caso de que no pueda asistir a un evento o terminar un pendiente no me estreso, entiendo que debo hacer otras cosas importantes.
Recuerda que todo se trata de equilibrar para triunfar a tu manera porque no es igual tu situación que la mía, pero sí podemos aprender y reflejarnos en el espejo de otras mamás para vivir una maternidad más plena y sin culpas
Mamá, abogada, mentora de negocios, fundadora de Empoderarte Mujer Mx, Bazar Empoderarte Mx y Hoja Verde papelería, Host de Charlas entre Mujeres.
Escritora por pasión, colaboradora asidua de causas sociales, trabajando con emprendedoras en el desarrollo y profesionalización de sus negocios.
Creciendo en tribu, siempre buscando como aportar valor a las personas que me rodean.
Mamá de 2 + 3 perritas