El cáncer de mama es el cáncer más frecuente en las mujeres tanto en los países desarrollados como en los países en desarrollo. La incidencia de cáncer de mama estáaumentando en el mundo en desarrollo debido a la mayor esperanza de vida,el aumentodela urbanización y la adopción de modos de vida poco saludables.
Aunque reducen en cierta medida el riesgo, las estrategias de prevención no pueden eliminar la mayoría de los casos de cáncer de mama que se dan en los países de ingresos bajos y medios, donde el diagnóstico del problema se hace en fases muy avanzadas.
Así pues, la detección precoz con vistas a mejorar el pronóstico y la supervivencia de esos casos sigue siendo la piedra angular del control del cáncer de mama.
Aunado a lo anteriormente mencionado, las múltiples investigaciones llevadas a cabo a lo largo de los últimos 20 años han dejado demostrado que existe una relación muy estrecha entre el tabaquismo y el aumento de probabilidades de padecer cáncer de mama en alguna etapa de nuestra vida.
En la actualidad, las mujeres jóvenes están consumiendo tabaco (preferentemente cigarrillos) en la misma proporción que los hombres en los países en vías de desarrollo como el nuestro, lo que inevitablemente hará que aumente la epidemia de cáncer de mama en mujeres de 20 a 40 años en las próximas décadas.
Aunque sin irnos tan lejos, en la actualidad se han contabilizado muchos más casos de cáncer de mama en mujeres menores de 40 años que las décadas anteriores.
El desarrollo del cáncer de mama se asocia con una mayor cantidad de tabaquismo actual y pasado, el tabaquismo durante un periodo de tiempo más largo, la edad más temprana en el inicio del consumo de tabaco y un mayor número de paquetes año de tabaquismo (producto del número de paquetes diarios y el número de años que se fumó esa cantidad).
Por otro lado, el tabaquismo pasivo en la infancia o la vida adulta se asocia también de forma directa con un mayor riesgo de cáncer de mama.
La exposición a padres que fumaban mientras vivían en la misma casa, el tabaquismo pasivo en el trabajo o en casa y el número de años que se vivió con alguien que fumaba son un factor predisponente a contraer cáncer de mama en alguna etapa de la vida, por lo tanto es muy importante no exponerse al humo de segunda mano.
Todas las mujeres debemos estar alertas de cualquier cambio en nuestro cuerpo, tener una alimentación adecuada, hacer ejercicio a lo que deberíamos agregar a la lista intentar estar lo más lejos posible del humo de tabaco, aunque no es determinante para contraer cáncer de mama si aumenta considerablemente el riesgo.
Este mes de octubre ayudemos a las mujeres a nuestro alrededor a hacer conciencia sobre esta terrible enfermedad, pero procuremos cuidarnos nosotras mismas todos los meses del año, informémonos, practiquemos la autoexploración mamaria y recuerden que después de los 40 años es importante hacerse la mastografía con la frecuencia que recomiende tu médico.
Somos una Revista para Mujeres con Sentido, con el firme propósito de generar herramientas de información que le permitan a cada mujer que nos lee, amarse, valorarse, reinventarse, construirse, aprender y transformarse en la mejor versión de sí misma.
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