El cuerpo humano es asombroso y cuenta con una gran cantidad de mecanismos que ayudan a que la vida sea mucho más fácil y divertida. Sin embargo, también pueden presentarse ocasiones donde el estilo de vida, los hábitos y la mala salud, pueden ocasionar daños, los cuales pueden causar molestias y malestares.
Un cuerpo saludable puede ayudar a que una mujer se sienta empoderada, fuerte y valiente, lista para cualquier aventura o reto en su vida. No obstante, existe un amplio porcentaje que sufre un serio problema: la incontinencia urinaria.
Este padecimiento puede deberse a muchos factores en la vida de una mujer y, ciertamente, puede llegar a controlarse. Lo más importante es tomar las decisiones correctas y dejar de huir del problema.
Usar productos para la incontinencia urinaria femenina
Una buena manera de comenzar a tratar este mal es contar con aparatos para la incontinencia urinaria femenina, los cuales pueden ayudar a prevenir accidentes y mejorar las funciones urinarias de manera notoria.
En la tienda En Suelo Firme se puede conseguir una gran variedad de productos para el tratamiento de este mal, así como opciones para mejorar el posicionamiento de la vejiga, la fuerza del suelo pélvico y la seguridad femenina.
Uno de los productos más recomendables son los tampones pesarios, que se pueden colocar igual que un tampón higiénico, pero con una finalidad distinta. En realidad, estos dispositivos se utilizan para subir ligeramente la vejiga de la mujer desde dentro, facilitando la corrección del ángulo vesical. De esta manera, se reduce el riesgo de cualquier escape de orina, sin importar la actividad que se esté realizando.
Asimismo, cuentan con otros elementos interesantes para fortalecer el suelo pélvico, actuando esto como un proceso corrector de la incontinencia urinaria y mejorando la vida de las mujeres que lo utilizan.
Alimentarse de manera saludable
La obesidad y la diabetes son dos factores que pueden ocasionar incontinencia urinaria en las mujeres, por lo que es esencial que se mantenga una dieta saludable para evitar caer en estos males peligrosos.
Se aconseja visitar a un profesional de la salud para determinar cuáles son los aspectos que se deben cambiar en los hábitos de alimentación de cada una y aprender a comer sin renunciar al sabor.
Hacer ejercicio regularmente
El sedentarismo también es un factor de riesgo, haciendo que sea necesario realizar algún tipo de ejercicio físico de manera regular. En este aspecto, existen distintas opciones que se pueden probar. Desde salir a correr 30 minutos al parque, hacer spinning, natación, bailar, ir al gimnasio, entre otras.
Lo mejor es elegir algo que realmente guste y que se pueda llevar a cabo, al menos 3 o 4 veces a la semana, para mantener fuerte el cuerpo.
Beber suficiente líquido
La orina es básicamente el resultado de todo el líquido que se bebe a diario. Una persona normal puede orinar cada 2 o 3 horas, mostrando una orina de color amarillo pálido.
No tomar suficiente líquido puede ocasionar un problema en los riñones, vejiga o hígado, lo cual puede resultar en incontinencia urinaria o algunos padecimientos peores. Por ello, lo mejor es mantenerse bien hidratado e ir al baño las veces que sean necesarias, sin aguantarse las ganas.
Colocarse en la posición correcta
Muchas mujeres sienten la necesidad de no tocar el inodoro al momento de ir al baño, ya sea porque es un baño público o porque no se sienten cómodas en el sitio en el que están.
Sin embargo, esto puede ocasionar serios problemas, puesto que las mejores posiciones para favorecer la micción es estar sentada o en cuclillas. De otra manera, los músculos de la vejiga no se relajan, evitando que la vejiga se vacíe completamente y ocasionando que la orina vieja se mantenga dentro.
La incontinencia femenina suele ser un problema bastante vergonzoso para las mujeres que lo padecen. A pesar de ello, es conveniente decir que tiene sus métodos para evitarla y para tratarla si ya se padece. Poco se sabe sobre la corrección definitiva de este problema, pero sí se puede vivir mucho más cómoda, teniendo en cuenta algunas consideraciones.
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