¿Porqué es Más Difícil Para las Mujeres Abandonar las Adicciones?

¿Sabías que para las mujeres es más difícil abandonar las adicciones?
Los estudios epidemiológicos han mostrado una prevalencia mayor en el uso de sustancias adictivas entre los hombres, pero encuestas recientes reflejan un aumento en las adicciones entre las mujeres, particularmente entre las adolescentes y las adultas jóvenes.

Los resultados de las Encuestas Nacionales de Adicciones en México muestran que existe una tendencia creciente en el consumo de tabaco entre las mujeres, mientras que en los hombres la tendencia es decreciente; asimismo, hay  un incremento importante en el consumo de alcohol entre las mujeres más jóvenes (15-19 años) y, se ha reducido la diferencia en las prevalencias hombre-mujer.

Ha aumentado el consumo experimental y continuado de cannabis, éxtasis, cocaína, psicofármacos entre las mujeres en todos los grupos de edad, aumento especialmente significativo en el grupo de edad 15-19 años.

Este incremento se debe en gran medida a que durante las últimas dos décadas ha habido una mayor aceptación social hacia el consumo de drogas por parte de las mujeres, es decir, cada vez se reconoce mayor validez a las adicciones entre las mujeres.

La mayoría de las mujeres que tienen adicciones han presentado en su historia de vida graves problemas psicosociales.

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Algunas investigaciones  indican que hasta un 70% de las mujeres que informan haber abusado de drogas, adicción al juego o al sexo, también declaran antecedentes de maltrato emocional, físico y sexual.

También hay datos que señalan que existen más casos  de alcoholismo y dependencia a drogas en sus padres. Por lo tanto, tomando en cuenta estos antecedentes, es común que después del uso experimental de drogas, la mujer desarrolle dependencia  con mayor facilidad que el hombre a algunas sustancias.

Cuando la mujer comienza a recibir tratamiento puede presentar una mayor dificultad  que el hombre para responder al tratamiento, con necesidades físicas y psicológicas diferentes para abandonar su adicción.

En la actualidad, se siguen existiendo barreras sociales para que las mujeres puedan acceder a los tratamientos de rehabilitación, muchas no buscan tratamiento por el miedo a no poder cuidar de sus hijos o de no poder mantenerlos, a las represalias de sus cónyuges y familiares, así como a las posibles sanciones de las autoridades sobre la custodia de sus hijos.

Se debe tomar en cuenta que gran parte de las mujeres adictas iniciaron su  consumo de drogas porque sus compañeros sexuales usaban drogas, por lo tanto, algunas investigaciones indican que una mujer dependiente tiene grandes dificultades para abandonar el consumo si su compañero o pareja consume drogas, facilitándole a ella la obtención de las sustancias.

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La adicción a sustancias es un grave problema de salud, crónico y recurrente tanto para hombres como para mujeres, pero entre las mujeres la adicción, el abuso y la dependencia a drogas desarrolla problemas diferentes y requiere de distintas  formas de intervención cuando se habla tratamientos.

Por ejemplo, es menos probable que las mujeres tienen estudios y  trabajo abandonen el tratamiento, y de manera opuesta en el caso de aquellas  que tengan otros problemas de salud, que presenten antecedentes de tentativas de suicidio y haber sufrido abuso sexual, agresión , abuso emocional o físico es más probable que se les dificulte mucho más completar un tratamiento de rehabilitación.

Las mujeres con antecedentes de abuso sexual, presentan tasas inferiores de retención en los tratamientos, incluso en aquellos en los que se provee el cuidado de los niños mientras ellas se rehabilitan.

Un factor importante a considerar en el tratamiento de las mujeres adictas, es contar con el apoyo continuo en el seguimiento para prevenir recaídas.

Se han señalado mayores índices de fracaso terapéutico en la mujer, en parte porque estas acuden frecuentemente solas a tratamiento, porque la familia desconoce la situación,  por no recibir apoyo o bien porque creen poder afrontar el tratamiento ellas solas. Lo que provoca un abandono temprano del tratamiento.

También se ha encontrado que las mujeres en tratamiento presentan más problemas psiquiátricos, médicos y sociales que los hombres. Las mujeres diagnosticadas con trastornos mentales y abuso de sustancias presentan una variedad de dificultades que requieren intervención múltiple para poder tratar la adicción y el origen de la misma.

Ahora sabemos que una persona que desarrolla la enfermedad de la adicción, además de tener  una predisposición biológica y social, también el desarrollo de los factores de riesgo que existen en su entorno pueden ser determinantes.

Recientes estudios, han demostrado que hay una serie de factores de riesgo que son propios y exclusivos de las mujeres como la poca participación social, discriminación, vergüenza por beber más de lo normal o bien por consumir sustancias ilegales, tener un matrimonio destructivo o poco estable, tener demasiada atención en las labores del hogar además del trabajo, falta de comunicación con sus parejas, sufrir violencia , poco sentimiento de valoración de su persona o de su vida, entre otras que las hacen más vulnerables a experimentar un problema de abuso de sustancias, trastornos de la conducta alimentaria, compras compulsiva o de cualquier manifestación de la enfermedad de la adicción.

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Por lo anterior,  se debe empezar a poner énfasis en las diferencias biológicas y emocionales que existen entre ambos sexos, creando una cultura de la prevención y el desarrollo de programas de tratamiento con enfoque de género para conseguir mejores resultados en la rehabilitación de las mujeres; a la par se debe trabajar en concientizar a la población sobre las consecuencias del consumo de drogas, mostrando la importancia y el apoyo que debe brindar la familia a aquellas mujeres que están en recuperación, ya que generalmente son más apoyados los hombres durante este proceso, mientras que las mujeres son abandonadas para enfrentarlo en soledad.