Lidiar con la pérdida de un ser querido, ya sea por muerte o ruptura, es uno de los trances mas retadores que cualquier ser humano puede enfrentar. De ahí la importancia de vivir el duelo de manera adecuada y completa, a fin de digerir este proceso y asumir el aprendizaje.

El duelo se define como una serie de reacciones naturales ante la perdida de algo o alguien.

Hay diferentes tipos de perdidas, la muerte no es la única causa de dolor y sufrimiento; también hay pérdida de la salud, de roles sociales, cambio de residencia, fracaso laboral o económico y proyecto de vida.

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Cada persona reacciona de manera distinta a la perdida. Hay factores que pueden aligerar o dificultar el duelo, esto dependerá  de la calidad de la relación con el objeto perdido, las circunstancias que hay alrededor del evento (enfermedad, accidente, etc), personalidad e historia de vida y la disponibilidad de apoyo del entorno (familiares, amigos, profesionales de la salud, etc).

Superarlo puede tomar de uno a dos años, siempre y cuando se maneje de manera adecuada, de lo contrario podría convertirse en crónico.

Para que se supere una perdida hay que vivir todas sus etapas para las cuales no hay “atajos”. El duelo duele. La buena noticia es que tiene una caducidad y la aceptación llegará cuando se logre cerrar el círculo y sanar la herida .

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El duelo tiene varias etapas . Elizabeth Kübler Ros señala que es un proceso que vendrá acompañado de negación, tristeza, enojo, culpa en distintos momentos y sin un orden especifico, pero nos llevará finalmente a la aceptación.

Es importante tomar en cuenta que el duelo es una condición inherente al ser humano que requiere de mucha voluntad. Conectarse con la tristeza y dejarnos sentir es como se empieza el camino de recuperación. Ponerse en contacto con el vacío que ha dejado la pérdida y darle su justo valor nos llevará a enfrentar la vida mas fortalecidos y con un verdadero crecimiento interior.

Los seres humanos somos resilientes por naturaleza, lo que implica que todos tenemos la capacidad de reponernos ante una pérdida igualmente cuando un hombre enfrenta una ruptura . Sin duda nada volverá a ser igual pero el duelo estará superado cuando al recordar el objeto de la pérdida ya no exista dolor y se haya podido asumir el aprendizaje invirtiendo toda aquella energía en lo que sí tenemos y no en lo que ya no está.

El objetivo es lograr que esa persona que ya no está siga viva en nuestro corazón, siguiendo vigentes sus enseñanzas y vivencias, honrando su memoria y llevando una vida de paz y bienestar.

Victor Frankl en su libro «El Hombre en Busca de Sentido», nos enseña que solo nosotros tenemos la capacidad de decidir y escoger el tipo de sufrimiento que queremos vivir, cómo lo vamos a enfrentar y sobre todo que sentido vamos a darle a lo ocurrido, siempre recordando que nadie puede recorrer ese camino por nosotros.

Al final nos daremos cuenta de nuestra fortaleza y de lo que somos capaces de lograr para sobreponernos a una experiencia infinitamente dolorosa, una ruptura amorosa y que siempre, si nos lo proponemos, podremos encontrar la bendición que existe detrás de esta vivencia.

En resumen, el duelo es el proceso necesario para trascender y sanar cualquier tipo de pérdida y en este camino la intervención de un profesional nunca esta de mas.

Teresita Benavides

Psicoterapeuta Humanista con más de 10 años de experiencia, enfocada principalmente a Depresión, trabajo de Duelo e Inteligencia Emocional.

Tras concluir sus estudios en Ciencias de la Comunicación en la Universidad Anáhuac, obtuvo el título en Psicología por la Universidad de Carleton University de Ottawa, Canadá, para después culminar una maestría en el Instituto Mexicano de Psicoterapia Gestalt de México. Cuenta con una especialidad en Terapia de Pareja con Enfoque Sistémico, por el Centro de Estudios Superiores Monte Fenix.
Actualmente estudia la Maestría en Psicoterapia Cognitivo Conductual en el ISEP.

Imparte cursos y talleres de Autoestima, Niño interior, y Escuela para Padres.
Ha participado en la elaboración, aplicación e integración de Baterías Psicológicas para el diagnóstico clínico, así como en el reclutamiento, selección de personal que labora en empresas de seguridad privada.

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