Esta frase se hizo famosa porque fue el título de una película en la que de una forma simple y simpática nos mostraron diferentes situaciones   que vivimos las mujeres antes de convertirnos en madres y aunque no todo lo que muestran es del todo cierto, debo decirles que la forma en la que cada una de nosotras lo vive es totalmente diferente, por eso es importante tener la confianza en nosotras mismas, en nuestros sentimientos y decisiones.

Ver esta película me hace recordar algunas anécdotas y sentimientos que viví durante mis embarazos y déjame decirte que no soy de las que piensa que el embarazo es una dulce espera -los míos no tuvieron nada de dulces- aunque no significa que hayan sido horribles, me dejaron mucho aprendizaje sobre mí misma y lo que debía conocer durante mi embarazo y al momento de que mis hijos nacieran:

  • Lo primero que aprendí es que no hay nada mejor que tener un ginecólogo de toda tu confianza, que tenga tu historial y que te lleve el control de todo tu embarazo.
  • También me tocó aprender que debía escuchar a mi cuerpo, cuando estaba cansada, descansaba, si tenía algún dolor inusual, preguntaba inmediatamente a mi ginecólogo.
  • Que todas las preguntas y dudas que tenía debía responderlas mi médico, no las mamás de los grupos de Facebook porque ninguna había pasado un embarazo exactamente como el mío.
  • Yo tuve a mis dos hijos en hospital privado -no contaba con seguro de gastos médicos mayores- por lo tanto, me atendía todo el embarazo en el IMSS y con mi médico, porque sabía que si había alguna urgencia podía atenderme en el hospital público en cualquier momento.
  • Cuando se tiene presupuesto limitado para el parto, se debe contemplar la opción de buscar un hospital público donde nos puedan atender en caso de necesitarlo.
  • Ten cuidado con los antojos y tu alimentación, no comas nada en exceso y procura comer pocas azúcares y carbohidratos, además te ayudará a sentirte mejor. Si tienes la oportunidad de llevar tu alimentación con una nutrióloga es mucho mejor, yo siempre tuve una que me llevaba los embarazos a la distancia excelente.
  • Camina todo lo que puedas, ejercítate de la forma que consideres adecuada -una vez que lo hayas hablado con tu ginecólogo-, créeme que te vas a sentir mucho mejor durante todo el embarazo.
  • Decide tú como quieres que nazca tu bebé, no te dejes llevar por lo que otros dicen, recuerda que serás tú quien dé a luz, así que lo único importante es lo que tú quieres.
  • Debes recordar que hay cosas durante el embarazo y el parto que no están en tu control, así que siempre mantente alerta y abierta a cualquier posibilidad.

A veces al embarazarnos no pensamos en todo lo que cambiará y vivirá nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestro espíritu, así que prepárate para todo lo que pueda suceder, sin miedo y con la tranquilidad de tener siempre un apoyo crucial en tu médico.

Diana Calderón Sánchez

Diana Calderón Sánchez

Mamá, abogada, mentora de negocios, fundadora de Empoderarte Mujer Mx, Bazar Empoderarte Mx y Hoja Verde papelería, Host de Charlas entre Mujeres.
Escritora por pasión, colaboradora asidua de causas sociales, trabajando con emprendedoras en el desarrollo y profesionalización de sus negocios.
Creciendo en tribu, siempre buscando como aportar valor a las personas que me rodean.
Mamá de 2 + 3 perritas